Braskem ha reafirmado su compromiso con la protección del medio ambiente y la innovación al concluir una ambiciosa expansión en su planta de etileno de base biológica. Con una inversión de $87 millones, la compañía ha aumentado la capacidad de producción en un 30 %, posicionándose a la vanguardia de la producción de biopolímeros sostenibles.

La planta de etileno de base biológica, ubicada en el Complejo Petroquímico de Triunfo en Brasil, ha sido optimizada para producir 260,000 toneladas anuales de etileno sostenible. Este avance tecnológico permite la fabricación de resinas plásticas a partir de etanol derivado de caña de azúcar, eliminando así el dióxido de carbono (CO2) de la atmósfera y reduciendo el impacto ambiental.

La inversión de Braskem responde a la creciente demanda mundial de productos sostenibles y ecoamigables. Con su enfoque en la producción de etileno de base biológica, la empresa busca satisfacer la necesidad de soluciones más sostenibles y avanzadas en la industria de polímeros.

Fuente: Tecnología del plástico