En Argentina, el gobierno anunció el mes pasado que sus compras a China comenzarían a pagarse en yuanes en vez de dólares, para preservar sus debilitadas reservas internacionales.
Y en Brasil, donde el yuan desbancó al euro como la segunda principal divisa de reservas extranjeras, el gobierno también anunció un acuerdo para comerciar con China en las monedas de ambos países y evitar recurrir al dólar.
Estos cambios en dos de las mayores economías latinoamericanas son señalados por el presidente de Bolivia, Luis Arce, como parte de una «tendencia» regional a la que su país podría sumarse.
Fuente: BBC News